Cuando empezás a invertir, es fundamental conocer ciertos conceptos que funcionan como brújula para tomar mejores decisiones. En el caso de Argentina, dos indicadores esenciales son el Merval y el Riesgo País. Ambos reflejan, desde ángulos distintos, el pulso del mercado y la confianza en la economía local.
El Merval es el índice principal de la Bolsa de Valores de Buenos Aires y actúa como el gran indicador del desempeño bursátil local. Puede pensarse como un termómetro que mide la “temperatura” de las empresas más representativas de la Argentina.
Este índice se construye como un promedio ponderado de las acciones más relevantes que cotizan en el mercado argentino. Las compañías con mayor tamaño e impacto en el volumen de operaciones tienen más peso en el cálculo. Entre los criterios utilizados para su selección se incluyen el volumen negociado, la capitalización bursátil, la frecuencia con la que se realizan transacciones y la representatividad dentro del mercado.
Cuando el Merval sube, significa que en conjunto las acciones de las principales empresas argentinas han tenido un buen desempeño. En cambio, cuando baja, refleja que el valor promedio de esas compañías cayó. Es importante recordar que el índice refleja una tendencia general y no necesariamente coincide con el rendimiento de cada acción individual.
El Merval es una referencia clave para los inversores locales porque ayuda a medir el clima general del mercado, evaluar cómo se comporta tu cartera en relación al índice, identificar tendencias de corto y largo plazo y, en función de eso, tomar mejores decisiones de compra o venta.
Otro indicador fundamental es el riesgo país. Este mide qué tan confiable consideran los inversores internacionales prestarle dinero a la Argentina en comparación con Estados Unidos, que se toma como referencia por ser considerado el emisor más seguro del mundo. El resultado se expresa en puntos básicos.
El riesgo país surge de la diferencia entre el rendimiento que ofrecen los bonos argentinos y los bonos del Tesoro de Estados Unidos. Por ejemplo, si un bono argentino rinde 10% y uno estadounidense 3%, la diferencia de 7 puntos porcentuales se traduce en 700 puntos básicos de riesgo país.
El riesgo país tiene un efecto directo sobre diferentes variables económicas. En el caso de los bonos, cuanto más alto es el riesgo, menor es su precio y mayor la tasa que exigen los inversores para comprarlos. También influye en el tipo de cambio, ya que un nivel elevado reduce el ingreso de divisas y suele presionar al alza el dólar. Además, afecta a las empresas locales, en especial aquellas que dependen del financiamiento externo para sostener su actividad.
El nivel del riesgo país está condicionado por aspectos como la estabilidad política y económica, el nivel de endeudamiento, la capacidad de pago de la deuda, las relaciones con organismos internacionales y las políticas económicas que lleva adelante el país.
Entender el Merval y el Riesgo País no significa predecir el futuro del mercado, pero sí contar con dos herramientas clave para interpretar mejor el contexto argentino. Incorporarlos en tu análisis te permitirá evaluar con más claridad tus decisiones y construir una estrategia de inversión más sólida y consciente.